miércoles, 29 de junio de 2011

Y las emociones qué---

Somos seres emocionales nos guste o no.
La gran mayoría de nuestras acciones se mueve en base a nuestros sentimientos. Amamos algo, y entEl sufrimiento intenso y el dolor que sufren las personas ante una infidelidad es enorme. En ocasiones, han pasado años, y se sigue con la misma sensación de traición, de rabia y de enojo hacia la pareja infiel.
El miedo, el dolor, el enojo y la ira dominan por momentos la relación que viven en el día a día. Este sentimiento de traición al amor, al vínculo, a la relación genera desconfianza, recelo y celos propiamente dichos.


Existen intentos de olvidarlo. Tratan de hacer como si nada pasara. Pero después de un tiempo, se dan cuenta que no han podido olvidarlo y que su herida sangra y se recrudece con suma frecuencia. Las personas que están dispuestas a perdonar “ el acto infiel”, desean de verdad, pasar la hoja, sobre todo cuando ha habido demostraciones genuinas acerca del arrepentimiento. Y sin embargo, no lo logran.
Pensamientos y sentimientos intensos y perturbadores cobran vida en esas personas.
Pero: ¿es posible supera una infidelidad?
Por tanto, se establece que se trata de una herida constante y permanente que no deja de gritar para ser reconocida. Evidentemente es una lesión del alma, del corazón y del orgullo personal.
Varias condiciones psicológicas se encuentran implicadas en la infidelidad:
- El orgullo personal.
- La autoestima.
- Una herida narcisista que no para de mostrar sus dolores y dolencias.
Aún cuando, yo he hablado mucho sobre los amores narcisistas y sus implicaciones, es una realidad que el narcisismo es una capa de la personalidad que todos tenemos y en los que resguardamos nuestro Yo y nuestra integridad.
En la infidelidad, es un moretón que se hace hacia nuestro narcisismo o amor propio. Se encuentra en nuestro ser, en lo más íntimo de nuestra persona.
El narcisismo está en relación directa con lo que Yo considero mi derecho propio, es por ello, que resulta tan difícil superar una infidelidad. Pero no existe otro camino que emprender un camino de recuperación sobre el sí mismo.
Lo genera la infidelidad es una sensación de traición, de burla, de engaño, nos dan en nuestra propia vanidad. En cierto sentido, para establecer una relación de pareja, es necesario sentir que el otro nos pertenece, es decir, que está comprometido solo con nosotros en este amor.
Y siempre están presentes los reproches internos que nos demuestran.
- Que somos prescindibles para quién amamos.
- Que no somos suficientes para esa pareja.
- Que nuestra valía ha quedado comprometido por otro u otra, que tal vez, hasta consideremos menor a nosotros.
La persona que ha padecido la infidelidad ahora desea venganza, no sabe cómo, y al mismo tiempo, le resulta difícil luchar con esos sentimientos tan desgarradores. Por ello, resultan incomprensibles los periodos largos de recuperación para una situación de infidelidad.
Es posible superar la infidelidad?
Depende, a veces sí y en otras circunstancias sí. Mientras el vínculo se haya comprometido demasiado, aunque parezca mentira, lo mejor es tomar distancia y emprender un camino para curar esa herida tan propia que el otro realizo, pero que recae sobre nosotros la recuperación.
Algunas parejas optan por repensar su relación de pareja, y en ocasiones, es un punto de apoyo para reconstruir su pareja. No existen ni remedios ni recetas depende de cada una de las personas y de la dinámica de esa pareja en lo particular.
Sin embargo, en mi libro:
Cómo Recuperar la Confianza en el amor, Yo afirmo, que infidelidad es uno de los riesgos de vivir en pareja. Y que además, ser fiel o infiel, no está en la pareja, sino que es una elección personal para la lealtad al vínculo y al compromiso amoroso con el otro.
No existe otro camino que enfrentar el dolor y tocar fondo en el dolor, además de emprender un camino de desarrollo personal y evaluar qué estamos dispuestos a dar, a tolerar o no, a partir, de esta situación infiel.