viernes, 12 de abril de 2013

El Maltrato Infantil...

Ayer tuve la oportunidad de participar en un Coloquio sobre el tema de Maltrato Infantil.
Mi experiencia está centrada en todos aquellos que han sufrido maltrato infantil en alguna forma, pero trato las secuelas, lo que sucede años después del mismo.

Las huellas de este tipo de maltrato infantil son una de las constantes en la psicoterpia.

Los tipos y modos del maltrato infantil son variados y abarcan varios rubros. El maltrato a los menores es una constante en las sociedades, pese a que, los psicólogos, psiquiatras, especialistas han alzado la voz al respecto, parece que sus aportaciones son poco escuchadas en una sociedad carga de interéses y poder.

El maltrato infantil tiene variantes puede ir desde la parte física, esos golpes que ponen en evidencia ese maltrato infantil, pasando por la crueldad psicológica: enfados, culpas, castigos, encierros, agresiones que laceran el Ser de un infante que no tiene posibilidades de defensa frente al agresor. Luego vemos aquellos aspectos que tienen que ver con la sexualidad con todas sus aberraciones.

Hemos todos dicho que los niños de hoy son el futuro del mañana y también aprendí en el Coloquio sobre Maltrato Infantil del cuál fui expositor, que no son las generaciones del mañana, sino que son existencias del hoy que sufren y padecen un trato indigno que los constituye a una suerte que ellos no decidieron.

¿Qué clase de sociedades vivimos?


  • Adultos ocupados en sus problemas que permiten y ejercen cualquier tipo de abuso hacia los niños que posteriormente se convierte en Maltrato a los menores, Maltrato Infantil.
  • Padres que no logran superar su problemática y arremeten frente a ellos?
  • Una economía rampante que permite su explotación porque es un buen negocio?
  • Tráfico de niños, de sus órganos, de sus vidas y de su existencia.
Con qué derecho los adultos enfemos o no, les quitan una posibilidad a los menores de una existencia digna, de un desarrollo de juego de vida, de abrazar sus circunstancias y ser hombres o mujeres de bien.

En mi consulta Yo trato con las secuencias de esta circunstacia de maltrato, pero definitivamente, no se trata de saber qué hacemos después, sino que hacemos hoy...

La niñez es una capa muy vulnerable, su psicología no puede resolver ni comprender sus circunstancias de vida, aquellos que hemos sido afortunados, tenemos que alzar la voz, coindicir y estar alertas para contribuir a que esos niños que son víctimas de maltrato tengan mejores condiciones de vida , los derechos humanos lo sustentan en el papel.

Pero y nosotros qué?
Qué hacemos con los niños que nos circundan?



Tal vez, somos padres, psicólogos, educadores, trabajadores sociales, médicos, enfermeros.

Y nos contentamos en pensar que no es nuestro problema.

Todos estamos inmersos en contribuir o ser cómplices pasivos frente a esta problemática social y mundial.

Para mí, es muy importante la existencia humana y nada justifica ningún maltrato, abuso o agresión tanto para los niños como para cualquier individuo...

Soy Ana Giorgana y estoy dedicada a la calidad de vida emocional.

Y sí consideras que no puedes manejar tu ira, agresión hacia los pequeños, te sugiero que reflexiones, busques un especialita., 

A mí, puedes contactarme a través de la página www.cecreto.com


Tenemos que ser propositivos, más que agentes pasivos que perpetúan estas circunstancias de maltrato infantil.

Te invito a que mires este video sobre la importancia de la personalidad de los niños

miércoles, 10 de abril de 2013

La infancia la capa más vulnerable para el maltrato

Los adultos somos responsable de cuidar y proveer a la prole de los mejores cuidados para su desarrollo. Las generaciones de adultos, representan y son necesariamente los indicados para cuidar a los pequeños. Lejos de estar conscientes de esta importancia en su vida, se lanzan a la tarea de agredirlos, lastimarlos, golpearlos, regañarlos, y hasta darse el lujo de tornarse crueles y además de maltratarlos sin tapujos. La infancia es una etapa de la vida que lleva al desarrollo, al crecimiento, a aprender las habilidades intelectuales, sociales, emocionales. Al mismo tiempo, el hogar es el lugar, en el que se aprende el respeto, la admiración, el cariño, la responsabilidad, la pertenencia y la identidad. En esta identidad se forma el autoconcepto y la autoestima.

 Sin embargo, parece que muchos adultos no pueden observar esa gran diferencia. Los niños no pueden reaccionar ni entender las agresiones y abusos a los que algunas veces son expuestos, porque su psicología se encuentra en formación.

No pueden defenderse, no tienen los elementos. Además, un niño, hará lo que sea necesario tolerar, solo para pertenecer y agradar a los padres y a los adultos.

 No le queda de otra, depende de ellos, en todos los sentidos. Los hogares se encuentran imbuidos en las necesidades adultas, sin darse cuenta que los niños es la capa más vulnerable.

 Arremeten contra ellos para dar rienda suelta a sus impulsos de placer y de enfermedad, como en el caso del abuso. Se les lastima y agrede cómo si fueran responsables de todas las frustraciones parentales. Se les exige que respondan y además que se aguanten a las neurosis de los adultos.

 Los niños no cuentan con elementos para entender, para comprender, para limitar el mundo de los adultos. Existen padres, que vuelcan toda su rabia, y les reclaman, que los hijos, son los responsables de su situación ya sea de carencia económica y afectiva.

 Otros, los vuelven confidentes, y quieren que se pongan en contra del otro padre, con el que están en conflicto. Por otro lado, las sociedades, pareciera que también se ensañan en cargarles la mano a los niños, trafican con ellos, les venden drogas, los explotan en la pornografía infantil, los someten a trabajos forzados y después de todo, sí protestan, una vez más, desatan la ira y el maltrato. Qué estamos haciendo con la infancia, qué clase de adultos somos que no somos capaces de cuidar una parte de las capas más preciadas de la sociedad, la infancia. No olvidemos que los niños serán los jóvenes de mañana y las generaciones futuras.

 Con qué elementos van a llegar a ser líderes de sus sociedades, de sus hogares, de la economía. En Psicología, nadie puede dar lo que no tiene o siente que no merece. Entonces cómo un niño en el futuro cuidará de sí mismo, sí nunca supo lo que es ser querido y protegido.

 Cómo va a cuidar su hogar, su ciudad, su país, y en términos, macro el medio ambiente, la economía a ver por otros y también ayudarlos a su desarrollo, sí ellos, sólo han recibido agresiones en la casa, en la escuela y en el medio ambiente. Seamos más conscientes, los adultos tenemos una gran responsabilidad, los niños no son responsables de nuestros problemas. Brindémosles un mundo mejor, y eso, necesariamente se inicia con la toma de conciencia personal.

 Le propongo un ejercicio, sí usted, alguna vez, sufrió maltrato. ¿Cómo se sintió?, ¿Qué consecuencias tuvo en su vida? y sobre todo, porque sí eso le marcó en la vida, ¿Lo sigue haciendo o lo permite con los menores? Sí ha detectado alguna forma de violencia en su comportamiento que no puede entender o parar, consulte a un especialista. En Cecreto nos preocupamos y atendemos siempre la parte más sensible de los seres humanos, su propia existencia y experiencia. Gracias por leerme mi Misión es la calidad de vida emocional.
Soy ana giorgana
www.cecreto.com

martes, 2 de abril de 2013

El Estrés el Mal del siglo XXI



POR ANA GIORGANA
CALIDAD DE VIDA

Son las 3 de la mañana Teresa no ha podido conciliar el sueño, se levanta, se acuesta, cierra los ojos, los vuelve a abrir. Ve de nuevo el reloj, han pasado apenas 10 minutos desde la última vez que sus ojos se fijaron en la hora. Está agotada, tensa, llena de miedo, de enojo y de frustraciones. Mañana tendrá que ir temprano a trabajar y se encuentra molida.

No encuentra la manera de resolver sus problemas, sus pensamientos la abruman: cómo le voy a hacer con los niños, las colegiaturas, la casa, la enfermedad de mi madre y encima este ardor en el estómago que apenas le deja comer de a poquitos. A últimas fechas Teresa ha bajado de peso. Se exaspera, generalmente está de mal humor y no sonríe. La vida le ha dado una mala jugada. Ahora también está preocupada por su salud.

Finalmente no sabe a qué horas logró conciliar el sueño. El despertador suena a las 6 y media de la mañana. Entre quejas y cansancio Teresa se levanta y empieza sus actividades. Despierta niños, arregla el desayuno, los gritos se inician, la tensión va en aumento. A correr, no llegan a tiempo a la escuela, al trabajo, al banco.
A las 8 de la mañana Teresa llega al trabajo, se sirve una taza de café con leche y el estómago empieza a dar gritos de auxilio, de dolor. Teresa deja a un lado el café, se sienta en su escritorio y tiembla de coraje, de frustración y de miedo.



El transcurrir de su día es apenas de dos horas y Teresa no puede más, se siente muy culpable porque desde muy temprano les gritó a sus hijos, la casa se quedó a medio alzar, no durmió y ahora en este preciso instante, no puede probar alimento.

Para acabar de rematar el día tiene que terminar un informe de actividades, tiene todos los datos, tiene toda la información pero no encuentra la manera de empezar, aunque lo ha hecho ya en varias ocasiones, en este momento no encuentra cómo organizarse, cómo disponer sus ideas, su trabajo ya no es lo que era antes, ya no le motiva, ya no le gusta, ha tenido un rendimiento bajo a últimas fechas. En varias ocasiones le han llamado la atención por algunos descuidos menores. Sin embargo, ella en ese estado, piensa y siente que si no se esfuerza más, su trabajo podría estar en riesgo. Una vez más el estómago vuelve a arder y Teresa siente pánico por su salud y por las consecuencias que podría tener en su vida y en lo que le confiere. Siente el peso de la responsabilidad de su vida y aún hoy a las 12 del día, no ha podido terminar su informe. El estómago le molesta cada día más, está cansada, no durmió y ahora el dolor de cabeza le retumba más y más.

Teresa entonces, tiene ganas de botar todo, incluso de desaparecer.

Este no es más que una pequeña historia de lo que el estrés hace en nuestras vidas y de cómo se manifiesta en nuestra salud y en nuestro entorno.

En fin, cuando una persona se encuentra estresada todas las áreas de su vida se ven impactadas y se inicia un círculo viciosos y un deterioro importante en la calidad de vida.

El estrés afecta por igual a hombres, mujeres, jóvenes y niños y es inevitable, pero es muy importante aprender a manejarlo.

Si usted presenta alguno de los síntomas anteriores no deje de consultar a un especialista.

Existen técnicas poderosas y sencillas que permiten controlar y manejar el estrés en la vida cotidiana.

Generalmente no es un problema que se pueda resolver en soledad, se necesita que una persona capacitada le ayude a comprender su problema y juntos elaboren un plan de acción para atacarlo.

El estrés, mal del siglo XXI

:La actitud de un individuo puede influir para que una situación o una emoción sea estresante o no
La salud
sueño.
 Dolores de cabeza
Gastritis
Tensión muscular
Cansancio
Fatiga
 Colitis
Hipertensión arterial, en casos severos infartos.

Las emociones:
Irritabilidad
Sentimientos de fracaso
Temores exagerados
Baja autoestima
 Depresión
Somatizaciones
Abatimiento
 Ansiedad
Aislamiento y sentimientos de soledad e impotencia.

Los Pensamientos
>Pensamientos negativos
>Pensamientos de fracaso
>Pensamientos de miedo
>Pensamientos de incompetencia
> Pensamientos pesimistas

Las Relaciones Interpersonales
> La familia
> Las relaciones sociales y laborales
El trabajo
>Bajo rendimiento
>Ausentismo
>Baja calidad en el trabajo
>Temor por la pérdida del mismo

El estrés es un estado dañino que afecta por igual a todas las áreas de la vida de las personas, dentro de ellas se encuentran:

“Cuando una persona se encuentra estresada todas las áreas de su vida se ven impactadas y se inicia un círculo viciosos y un deterioro importante en la calidad de vida”.

AFECTACIONES
“Existen técnicas poderosas y sencillas que permiten controlar y manejar el estrés en la vida cotidiana”.

El estrés se define como una sensación de tensión tanto física como emocional. El estrés emocional generalmente ocurre en situaciones consideradas difíciles o inmanejables, por lo tanto, diferentes personas perciben diferentes situaciones como estresantes.

El estrés físico se refiere a la reacción física del cuerpo a diversos elementos desencadenantes, como el dolor que se siente después de una cirugía. El estrés físico a menudo lleva al estrés emocional y este último se experimenta frecuentemente como un malestar físico (por ejemplo, cólicos estomacales).


REALIDAD: El manejo del estrés se refiere a los diversos esfuerzos por controlar y reducir la tensión que ocurre en situaciones estresantes

Bueno y sí lo padeces, busca a los especialistas, a nosotros, puedes consultarnos en la página www.cecreto.com

En el formulario de contacto, envíanos tus preocupaciones, dudas.

martes, 26 de febrero de 2013

El tiempo se va como agua...

Ana Giorgana


El tiempo se va como agua, solo unos cuantos meses y ya estamos terminando Febrero del 2013. Es verdad el tiempo es una medida que si bien es específica, también es cierto que tiene un concepto individual.
Cuando estamos aburridos el tiempo se va despacio, vemos el reloj y pareciera que los minutos no avanzan, apenas sí han pasado dos o tres segundos y volvemos a mirar el reloj.

Pero cuando estamos contentos, entretenidos, divertidos o bien ocupados en algo que es de nuestro interés, el tiempo se va de volada como si no tuviéramos ningún control sobre ello."Se acabó la fiesta, la charla con los amigos, no he terminado y el plazo para entregar el proyecto se está acercando...." No digamos cuando tenemos una larga lista de cosas por hacer, no alcanza el tiempo, es una queja popular.
La realidad es que el número de horas es igual para todos. Todos contamos con los mismos minutos y segundos en el día, en la semana, los meses y los años. Es una condición más bien plantear:
¿Qué hacer con ese tiempo, que todos tenemos por igual?
El tiempo tiene que ver con una percepción individual como lo mencioné anteriormente. Algunas personas desperdician la mayor parte del tiempo, y cuando se dan cuenta, están muy apuradas teniendo que terminar lo que les corresponde. Son el tipo de personas que todo lo dejan para después, postergan todas y cada una de sus actividades, aunque al final, las realizan llenas de estrés, de flojera o de presión y para ellas, sí que el tiempo no alcanza para nada.
Otras personas tienen muy buena gestión de sus tiempos, planean sus actividades, dan a cada momento el tiempo que les corresponde. Y generalmente, viven con menos estrés porque son capaces de asignarle a cada actividad un tiempo razonable para cubrirlo.

La proactividad es una de las formas de emplear mejor el tiempo. Es decir, volverse activo participante de aquellas metas, objetivos, planes y logros que necesitamos realizar. Emplear el tiempo en nada nos llevará a nada.
Ser proactivo significa resolver lo que se requiere en el momento en que se requiere y fijarse en una sola cosa a la vez, muchas personas que se encuentran embotadas con el tiempo, o faltos de minutos y segundos se debe a su incapacidad de planear. Nadie puede hacer dos o tres cosas al mismo tiempo. Es importante centrarnos en la actividad que nos corresponde en el momento presente y ejecutarla lo mejor posible.
Cuando estamos sujetos a realizar diferentes actividades al mismo tiempo siempre existen retrasos, olvidos o cosas que se tienen que ir al “ahí se va”.
Si bien el ser humano puede estar pendiente de varias cosas, no quiere decir que se pueda concentrar en todo al mismo tiempo. Para utilizar el tiempo de una manera más eficiente se necesita concentración, objetivo y acción.
Pero sí la mayoría del tiempo se va en cosas menores como estar pendiente de todos los correos que llegan, algunos de ellos, totalmente intrascendentes. Chatear mientras realizamos nuestro trabajo, además de que vemos cuántos tw, nos llegan y las distracciones de los compañeros de trabajo, estamos desperdiciando un tiempo precioso en pequeños consumidores del tiempo que nos quitan efectividad, concentración y enfoque.
El mejor empleo del manejo del tiempo se realiza a través de establecer objetivos en pequeños bloques y no pasar al siguiente hasta que el primero no haya concluido o no lo hayamos terminado. De lo contrario, tenemos una larga lista de actividades que cubrir, que dejamos a medias y nos queda un mal sabor de boca. Una gran insatisfacción de darnos cuenta de nuestra incapacidad para concluir y llevar nuestros objetivos hasta el final.
Por ello es muy importante tomar conciencia en aquellos aspectos o actividades que son consumidoras de un tiempo precioso que si lo sumamos, quizá ya hubiéramos terminado desde el medio día todas nuestras actividades importantes.
Otro punto importante es la jerarquía. Primero lo primero. Empezar el día con lo más importante. Hacer una lista de todo lo que tenemos que hacer y siempre ponderar qué es aquello más importante. Así las actividades menos importantes irán al último. Y no importa tanto, si en efecto, tenemos que posponerlas para el otro día como prioridad.
Y sí, efectivamente el tiempo pasa rápido tanto para no hacer nada como para dedicarnos a darle un sentido productivo, divertido, de convivencia o de desperdicio, el tiempo es sólo una forma de transitar la vida y la existencia.
Si lo piensa bien, estamos en la recta final de este año 2011 y sería muy bueno hacer un alto en el camino y replantear si aquellos objetivos que nos propusimos al inicio del mismo se han cumplido, sino tal vez eran buenos deseos.
Septiembre es un buen mes para hacer un balance, redoblar esfuerzos para replantear los objetivos y metas que aún no se han cubierto o hemos olvidado. ¡Ah! Y es muy importante ponerlos por escrito, la memoria es corta y una gran cantidad de estímulos consumen y fraccionan la atención.
Pero si desea estar más cerca de sus logros varios son los elementos que se requieren:
Objetivos.
Enfoque.
Gestión del tiempo.
Acción.
Disciplina.
La psicología del éxito ha puesto acento en estos elementos como una forma de sentirse satisfecho con los logros y perseverar hasta cumplirlos.
Pero sobre todo claridad y un proyecto de vida que incluya todos los aspectos de la vida de la persona. Si no sabemos qué queremos y qué es lo que deseamos lograr, seguramente nuestra vida irá a la deriva cubriendo lo que sea, cómo sea y la hora que sea.
Al final del día sólo nosotros sabemos si hemos hecho algo bueno con nuestro tiempo o si lo hemos dejado a merced de las circunstancias.
Entonces: ¿quién controla a quién?
El tiempo es, ahí está, pero quién determina que hace con él es cada uno de nosotros en lo particular. Y usted: ¿qué hace con el suyo?
Un proyecto de vida es importante, escríbeme, sí te interesa realizar un proyecto de vida personal.
www.cecreto.com

martes, 8 de enero de 2013

¿Será que ya no existen los valores?

Ana Giorgana
www.cecreto.com

Los valores rigen nuestra vida en sociedad y en lo individual.
Los valores son importantes y siempre difieren de persona a persona.
Los valores dan dirección a nuestras vidas.

Te invito a que visites este video acerca del tema






Los valores son cambiantes y se organizan por jerarquías.
Cada persona, cada ciudad, cada país cuenta con una esca la diferente.

Lo más importante es reconocer cuáles son los nuestros y actuar en consecuencia.

Los valores son abstraccíones que necesitamos traducir en acciones hacia nosotros mismos y hacia los demás.

Gracias por ser parte de este sitio

jueves, 3 de enero de 2013

Las sociedades violentas corren el riesgo de volverse más peligrosas...

Un tema que ocupa mi atención desde hace tiempo es la manera en cómo las socidades, los seres humanos ejercen violencia en todos los aspectos de su vida: familia, trabajo, en su entorno social, en sus seres queridos, en los desconocidos.

La violencia siempre tiene que ver con situaciones de poder y cuenta con implicaciones para los individuos que la ejercen como para aquellos que son sujetos pasivos de ello.

Te invito a que veas este video preparado por Cecreto  sobre este tema:




domingo, 21 de octubre de 2012

Sociedades Violentas...

Hace algún tiempo he escrito algunas reflexiones sobre la violencia y cómo repercuten en las 

personas y sus relaciones en lo individual...

Ana Giorgana
www.cecreto.com


La violencia parece ser una de las características de las sociedades actuales. Se observa, se vive y se experimenta por doquier. Nadie escapa de ella. Los hombres y las mujeres tienen que estar al acecho, de que otro, no venga a violentar sus derechos, su calma, su productividad, a su familia. Cuidar sus pertenencias y estar muy abusados para que no existen situaciones de abuso del afuera.
Pero también es una realidad que la violencia se puede ver en las formas y modos de comunicación, las imágenes, las noticias, el mundo del espectáculo y de la política da rienda suelta a sus agresiones y violencia frente a otros. Los más poderosos tampoco se escapan de sufrirla. Los diarios se convierten en sus bastiones para dar a conocer las atrocidades de otros, en el mundo de la política es lo usual, y más en épocas electorales.
La violencia tiene consecuencias graves cuando se enfocan como el único medio de relación entre los seres humanos. La violencia externa es difícil controlarla o quitarla de nuestras vidas. Está más allá de nuestras posibilidades de acción.
Cecreto también cuenta con temas sociales 

Pero la violencia interna, la que se gesta en el seno mismo de las familias está destinada a dejar fuertes implicaciones en la vida de quienes la ejercen como de quienes la padecen.
Nadie se considera violento sino que son sus formas y maneras de educar.
Nadie se considera agresivo sino que son las maneras de demostrar cuánto ama a su pareja. Nadie está en condiciones de reconocer su propia violencia y eso es lo más grave, la falta de conciencia frente a las actitudes propias o ajenas matizadas de rudeza, incomprensión, poder y control.
Todo acto de violencia tiene repercusiones. La primera es el descontrol y las fallas en el control de la rabia, de los impulsos que salen en su expresión más bárbara frente a otros que se consideran como menores al que ejerce la violencia.